martes, 21 de junio de 2011

Alí y Montalvo plantan al Racing y dejan el futuro del club en manos de Ignacio Diego

Ni el vendedor ni el comprador de las acciones del Racing en enero se pasaron ayer por la notaría de Juan Carlos García Cortés para atender al requerimiento del Gobierno en funciones de elevar a público los contratos firmados en su día y que permitieron a Alí hacerse con la propiedad del club. La ausencia del indio no sorprendió, aunque sí la del antiguo propietario. Por tanto, ahora la pelota está en el tejado del próximo Ejecutivo de Ignacio Diego, que será el encargado de desbloquear la situación de incertidumbre en la que vive la entidad si antes no aparece un nuevo inversor que sustituya al indio.
A primera hora de la mañana la expectación era máxima a las puertas del número 19 de la avenida Calvo Sotelo de la capital cántabra. Hasta allí únicamente se desplazaron dos de las cuatro partes que hace unos meses firmaron, primero en Zurich y después en El Sardinero, el contrato de compraventa. Por el Gobierno, representando a Cantur, Francisco Javier López Marcano, consejero de Cultura, Turismo y Deporte. Por el Racing, Roberto Bedoya, director general. Pernía no pudo estar ya que se encontraba de viaje encontrando sustituto a Alí.
Tras el encuentro, el actual Ejecutivo en funciones cedió la responsabilidad del futuro del Racing a sus sustitutos. Y es que ayer también acababa el ultimátum que le dieron a Alí para reponer el aval, que según comentó Marcano, «aún no ha repuesto». «Esto nos habilita para iniciar acciones judiciales», recalcó. Sin embargo, no lo harán. Esperaran a que el Ejecutivo del Partido Popular se formalice el próximo lunes para que sean ellos los que asuman la patata caliente. La nueva Administración tiene, según el consejero de Economía y Hacienda, Ángel Agudo, dos opciones: «Una, volver a la situación anterior antes de la firma con la prenda de las acciones por parte de Cantur y la otra, ejercer un derecho de compra a precio de mercado». Eso sí, también aseguró, que quien tiene que decidir «es el nuevo Gobierno». Agudo no acudió a la cita pero explicó su postura tras las preguntas de los periodistas en el transcurso de una rueda de prensa ajena en Peña Herbosa.
El Racing no está de acuerdo en lo xpuesto por el titular de Economía y hacen una interpretación diferente de los contratos. «En los documentos no figura la posibilidad de la prenda de las acciones, ni dar nuevos plazos ni avales...», explicó Bedoya. A lo que Agudo respondió a través de un trabalenguas: «Digan lo que digan, yo he dicho lo que he dicho».
Mientras tanto, van pasando los días y la incertidumbre en la que vive la entidad sigue ampliándose. En todo momento, como aseguró Agudo y Bedoya, el futuro Gobierno de Ignacio Diego está siendo informado de todos los pasos que van dando. Desde el Ejecutivo en funciones van explicando a Cristina Mazas, la persona elegida por Diego como interlocutora, de todas las decisiones adoptadas. Por tanto, cuando el próximo lunes quede constituido oficialmente el próximo Ejecutivo, deberán decidir si acuden o no a la Justicia.
En malas manos
Por su parte, en el Racing siguen trabajando en la búsqueda de soluciones para desbloquear la situación. Si el inversor capitalista no aparece y antes de acogerse a la Ley Concursal, el club recordó a Ignacio Diego lo que ellos consideran una salida viable. Solicitar que el Gobierno les avale para poder acceder a un crédito bancario. «El Racing podría devolver el dinero sin ayuda del dinero público. En el futuro podemos hacer frente a una amortización del crédito de 275.000 euros al mes, ya que registramos unos ingresos mensuales de 1,5 millones de euros», explicó Bedoya.
El director general también habló con el futuro Gobierno para explicarles el problema porque «las acciones del Racing están en unas manos que no son buenas». Diego ya conoce la propuesta del club, aunque como reconoció Bedoya, cree que «el futuro pasa por la llegada de un inversor solvente».
Nada más terminar el encuentro en Calvo Sotelo, Bedoya caminó hasta la sede Bancaja donde continuó perfilando el futuro económico de la entidad. Y es que el Racing, al margen de las decisiones que en el futuro pueda tomar el Ejecutivo, trabaja en dos frentes distintos. El primero es renegociar con Hacienda un nuevo calendario de pagos. Tras la llegada de Alí, este negoció un plan demasiado ambicioso con el que no ha cumplido. Por eso han tramitado una reconsideración de pagos. «De hecho hoy (por ayer) vamos a pagar 350.000 euros del aplazamiento», dijo Bedoya. Por otro lado, están las deudas con los jugadores que deberán sufragar antes del 1 de agosto, aunque los futbolistas tendrán que denunciar sus deudas ante la AFE, como muy tarde, el 30 de junio.
La plantilla está siendo informada de la situación «siempre que tengamos algo que decirles», concluyó el director general del club.

No hay comentarios:

Publicar un comentario